Tino Brugos, coordinador de Xega.Xega dice que la indemnización a presos sociales no repara el daño
AFIRMA QUE LA INICIATIVA DEL CONGRESO NECESITA ADEMAS ACCIONES PEDAGOGICAS
La asociación pide que las fichas policiales se envíen a archivos históricos.La falta de acceso a los documentos impide cuantificar a los represaliados.
19/12/2008 J. CUEVAS
Las indemnizaciones aprobada por el Congreso de los Diputados a las personas que fueron represaliadas por el franquismo a causa de su condición sexual no han sentado bien en el colectivo homosexual. El coordinador de Xente Gai Astur (Xega), Tino Brugos, señaló ayer que "si no se modifican", las líneas de compensaciones aprobadas son "claramente insuficientes para resarcir el daño moral".
Los represaliados que solicitaron las indemnizaciones de reparación cobrarán 2.000 euros si su estancia en prisión fue fue inferior a seis meses, 4.000 euros si la privación de libertad duro de seis meses a tres años y 6.010 por las condenas de más de tres años, añadiendo otros 1.202 euros adicionales por cada trienio de reclusión.
Brugos lamenta que las indemnizaciones no hayan sido "ejemplares" para tener un caracter pedagógico. Historias como la de Antonio Ruiz, un valenciano que arrestado, encarcelado y violado cuando aún no había cumplido los 18 años --la mayoría de edad se situaba por aquel entonces en los 21--, deberían de llevarse a las aulas como ejemplo de la represión sufrida por los homosexuales y a modo de ilustración para una educación preventiva. El coordinador de Xega resaltó de este modo la importancia de "trasladar a la sociedad que eso que pasó no debería de repetirse".
LA REPRESION ´BORRADA´ Aunque la represión por parte del Estado a homosexuales, lesbianas y transexuales se produjo desde la república hasta el año 1979, ni Xega ni la asociación de expresos sociales han podido localizar casos de asturianos encarcelados en base a la Ley de vagos y maleantes y, posteriormente, a la Ley de peligrosidad y rehabilitación social. Los únicos datos se refieren a gays perseguidos de otras comunidades que residieron en Asturias durante algún tiempo.
Las dos asociaciones tienen la certeza de que los casos que tuvieron lugar en Asturias fueron numerosos, pero aún queda mucha investigación por hacer. En el resto de comunidades autónomas, están apareciendo casos de lesbianas represaliadas que hasta ahora no se conocían, informa Tino Brugos. "Aquí sabemos que las redadas existían, y que por eso también había miedo a pasar por tal o cual calle, o también por la playa". Pero no existe el testimonio directo que ningún arrestado. "Todos los arrestos eran en el piso de abajo".
Para facilitar el estudio de esta cara de la represión franquista, los dos colectivos reclaman al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero que se expurguen los expedientes y fichas policiales para su envío a los archivos históricos. "Es importante que los podamos salvar, si no los han destruido ya", apuntó. Desde estos archivos habría "material de estudio" suficiente como para cuantificar el número de víctimas de las dos leyes que discriminaban en función de la condición sexual. Muchos de los homosexuales represaliados habrán muerto, lo que vuelve aún más complicada la labor de investigación.
Los represaliados que solicitaron las indemnizaciones de reparación cobrarán 2.000 euros si su estancia en prisión fue fue inferior a seis meses, 4.000 euros si la privación de libertad duro de seis meses a tres años y 6.010 por las condenas de más de tres años, añadiendo otros 1.202 euros adicionales por cada trienio de reclusión.
Brugos lamenta que las indemnizaciones no hayan sido "ejemplares" para tener un caracter pedagógico. Historias como la de Antonio Ruiz, un valenciano que arrestado, encarcelado y violado cuando aún no había cumplido los 18 años --la mayoría de edad se situaba por aquel entonces en los 21--, deberían de llevarse a las aulas como ejemplo de la represión sufrida por los homosexuales y a modo de ilustración para una educación preventiva. El coordinador de Xega resaltó de este modo la importancia de "trasladar a la sociedad que eso que pasó no debería de repetirse".
LA REPRESION ´BORRADA´ Aunque la represión por parte del Estado a homosexuales, lesbianas y transexuales se produjo desde la república hasta el año 1979, ni Xega ni la asociación de expresos sociales han podido localizar casos de asturianos encarcelados en base a la Ley de vagos y maleantes y, posteriormente, a la Ley de peligrosidad y rehabilitación social. Los únicos datos se refieren a gays perseguidos de otras comunidades que residieron en Asturias durante algún tiempo.
Las dos asociaciones tienen la certeza de que los casos que tuvieron lugar en Asturias fueron numerosos, pero aún queda mucha investigación por hacer. En el resto de comunidades autónomas, están apareciendo casos de lesbianas represaliadas que hasta ahora no se conocían, informa Tino Brugos. "Aquí sabemos que las redadas existían, y que por eso también había miedo a pasar por tal o cual calle, o también por la playa". Pero no existe el testimonio directo que ningún arrestado. "Todos los arrestos eran en el piso de abajo".
Para facilitar el estudio de esta cara de la represión franquista, los dos colectivos reclaman al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero que se expurguen los expedientes y fichas policiales para su envío a los archivos históricos. "Es importante que los podamos salvar, si no los han destruido ya", apuntó. Desde estos archivos habría "material de estudio" suficiente como para cuantificar el número de víctimas de las dos leyes que discriminaban en función de la condición sexual. Muchos de los homosexuales represaliados habrán muerto, lo que vuelve aún más complicada la labor de investigación.
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Diario Publico
Ex presos sociales reclaman más ayudas para los homosexuales
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