Por falta de empleo, el 95% de los “trans” ejerce trabajo sexual
De acuerdo con una encuesta nacional realizada a la población Trans, Lesbiana, Gay y Bisexual (TLGB) de diez ciudades del país, el colectivo que más discriminación sufre -en diferentes ámbitos- es el de los “trans” (travestis y transexuales). Así, ante la imposibilidad de contar con un empleo, el 95% de ellos ejerce el trabajo sexual.
Las consultas fueron hechas entre enero y abril de este año por el Fondo de Emancipación Conexión, con la ayuda de la organización TLGB.
En total se entrevistó a 623 personas: 55 “trans” (identificados con el género opuesto, según el sexo biológico), 160 lesbianas, 236 gays y 181 bisexuales.
En este estudio se apunta que si un travesti quiere trabajar, definitivamente tiene que ser como independiente, ya que obtener un empleo le resulta casi imposible, debido a la discriminación que sufren en la sociedad. Por lo tanto, no le es posible ahorrar.
Fuera de la prostitución, la población “trans” se dedica a la peluquería “como salvación”, según indica el documento, que incluye también datos sobre acceso a servicios de salud, educación y otros de los TLGB.
Sin embargo, el presidente de la Federación TLGB, David Aruquipa, aseguró que para revertir esta situación se buscan normativas que eviten la discriminación al momento de buscar trabajo para este grupo en particular. “Las travestis llevan en su cuerpo su identidad de género, y eso hace que sean el foco de atención, es por eso que hay mayor discriminación, con relación a los gays y lesbianas, los que podemos pasar de alguna manera hasta como heterosexuales. Son la cara visible de los TLGB”.
Un travesti expresa su género con el uso de vestimenta y complementos socialmente delimitados para el sexo opuesto, y aún no recurrió a una cirugía para cambiar de sexo. Un transexual es aquella persona que ha recurrido a la cirugía de reasignación sexual (cambio de sexo) o realiza tratamientos para ello.
La principal diferencia entre el travesti y el transexual es que el primero acepta su sexo y su cuerpo, pero gusta de jugar con una doble identidad.
Siguiendo el estudio, la población lésbica y bisexual tiene mayor acceso a empleo, que los “trans”, debido a que su identidad sexual es menos visible.
Pero la carencia de fuentes laborales no es el único problema que enfrenta este grupo. En los servicios de salud también sufre mayor discriminación con relación a los gays y lesbianas.
“A causa de ello, una compañera murió en pleno centro de salud. Nos dejan abandonadas en la camilla. La mayor parte de las veces nos automedicamos, por la vergüenza de cómo nos tratan”, se lamentan en un testimonio.
Sobre el estudio
•Instituciones Las que más discriminan a la población TGLB son la Policía, las iglesias y el Ejército, según la encuesta registrada.
•Prejuicio Los consultados perciben que la ciudadanía en general mira a los gays y lesbianas como promiscuos, y que sólo se abocan al sexo, sin tomar en cuenta que aman, sienten, lloran y que tienen relaciones sexuales como cualquier persona heterosexual.
•Familia Es la primera instancia que discrimina a los “trans, según el estudio.
•Bisexuales Algunos entrevistados tienen hijos y esposa, lo que hace muy difícil visibilizarse y asumir su propia identidad, por temor a la reacción de la familia, lo que ocasiona una vida frustrada.
Acceso a vivienda, educación y derechos
Según el estudio de Conexión, la población “trans” es la que más dificultades tiene para acceder a la vivienda. Sólo tres personas de cada 100 afirman que no hay accesibilidad a la vivienda, y 16 de cada 100 sostienen que la orientación sexual o la identidad de género es la causa de la poca accesibilidad a una casa.
Sobre este acápite, la encuesta precisa que sólo ocho de cada 100 personas TLGB que han tenido experiencia de cambio de domicilio manifiestan que fueron forzadas a dejar la vivienda por causa de su orientación sexual. Un 21% refiere que fue obligada a dejar una casa por problemas de convivencia.
Volviendo a la población “trans”, la mayoría tiene dificultades en el acceso a la educación debido a la falta de apoyo familiar. Por esta razón, se dedican al trabajo sexual desde jóvenes, según el estudio. Los profesores no aceptan que estas personas vistan con otra ropa que no corresponda a su sexo. Esto hace que reciban maltrato psicológico por parte de ellos.
De acuerdo con el informe, los travestis aseguran que la población los estigmatiza y los margina, viéndolos siempre en el ámbito de la prostitución y la drogadicción; no los incorpora a la sociedad. Este grupo sostiene que los policías los extorsionan, “les hacen pagar desde la gasolina”, y si no lo hacen, los maltratan de diversas maneras.
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