"El mundo del futuro será bisexual"
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La conclusión se basa en que se atenúan cada vez más las diferencias entre hombres y mujeres.
Julio Algañaraz ROMA CORRESPONSAL.
Dentro de por lo menos tres generaciones, el mundo evolucionará claramente hacia un "modelo único" en el que predominará la bisexualidad. Lo afirmó, levantando un revuelo, el oncólogo Umberto Veronesi: 81 años espléndidos, varios matrimonios y media docena de hijos, que es uno de los más famosos científicos de Europa. Veronesi está terminando sus vacaciones en el mar y no se tiró atrás cuando varios medios de prensa italianos le pidieron evocar un tema que ha formado parte de la movida veraniega europea en playas y salones.Al diario "Il Reformista", el gran especialista en cáncer -candidato al premio Nobel que casi todos los años viaja a la Argentina a dar conferencias-, le dijo que "se atenúan las diferencias entre hombres y mujeres". El hombre no debe luchar como antes por la supervivencia suya y de la especie y produce, por tanto, menos hormonas andrógenas. La mujer, que vive una revolución que la afirma cada día en nuevos roles, también "hace" en su organismo menos estrógenos. "Los órganos de la reproducción se van atrofiando lentamente", explica.Abruptamente está en cuestión la famosa, mítica frase: "Yo Tarzán, tu Jane", que la literatura y el cine convirtieron en el paradigma de los tradicionales géneros sexuales. Ahora, con el desarrollo de la fecundación artificial y las clonaciones, el sexo no es el único camino para la procreación. Hay que recordar las hipótesis científicas y de ciencia-ficción que pronostican que antes de un siglo quienes quieran hijos propios harán fecundaciones artificiales y serán eficaces incubadoras -hoy consideradas fantásticas- las que se encargarán en nueve meses de tener maduro y listo para sus padres a lo que en nuestros días llamamos un recién nacido.Veronesi cree que el sexo seguirá siendo una realidad pero "como gesto de afecto y no como vía a la reproducción". No será ya importante si elegimos hacerlo con una persona del mismo sexo o no. ¿El resultado? Una creciente realidad del "modelo único" bisex. Pero ¿será así "professore"?Esta vez, la pregunta le fue formulada a Veronesi por el "Corriere della Sera" de Milán, la ciudad donde el científico dirige el Instituto Oncológico Europeo, un centro de lucha contra el cáncer de prestigio mundial. Con una sonrisa, pero partiendo de bases científicas, Veronesi responde que la bisexualidad "será el precio a pagar por la evolución natural de la especie humana. Y creo que el precio es positivo".El "professore" sostiene que las mujeres han asumido, en las últimas dos décadas, roles cada vez más activos en las sociedades y esto lleva "a atenuar las diferencias sexuales. Tendremos hombres menos viriles y mujeres más masculinas. Desde el fin de la Segunda Guerra Mundial, la vitalidad de los espermatozoides ha caído a la mitad", afirma. La sexóloga Chiara Simonelli, docente en la Universidad La Sapienza de Roma, entrevistada también por el "Corriere", apoyó la perspectiva de Veronesi. "Habrá una mayor libertad de los estereotipos y los prejuicios. El fenómeno está en sus comienzos. Para que tenga más consistencia deberemos esperar otras dos o tres generaciones".Veronesi dice que la revolución ya comenzó, es biológica y cultural. "Los cambios de mentalidad y las evoluciones genéticas son fenómenos que se influencian entre sí".Eva Cantarella, que ha escrito un libro sobre la bisexualidad en las sociedades antiguas, afirma que antes "no había posibilidad de tener relaciones sexuales eligiendo con quién, sino respetando determinadas reglas, concedidas sólo a los hombres". Dice que los hombres adultos podían tener relación con jóvenes "pero sólo manteniendo el rol activo". Los jóvenes, cuando se hacían adultos "abandonaban el rol pasivo". ¿Y las mujeres? "Mujeres y madres. Sólo amor conyugal".
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