miércoles, 13 de abril de 2016

ACTIVISTA LGTBI Muere el escritor y activista Shangay Lily a los 53 años




Fue uno de los primeros 'drag queen' españoles, escribió varias novelas y debutó en el cine de la mano de Bardem y Sánchez-Gijón


El escritor y activista Enrique Hinojosa Vázquez, conocido con el nombre deShangay Lily, ha fallecido en la noche del lunes 11 de abril en Madrid, a los 53 años de edad, tras complicaciones en el desarrollo de una larga enfermedad, según han informado fuentes cercanas al artista, que no han querido precisar de cuál se trataba. Nacido en Málaga en 1963, fue uno de los primeros drag queenespañoles en la década de los noventa, en la que creó la Shangay Tea Dance, la primera fiesta de temática gay, y Shangay Express, la primera revista gratuita exclusivamente homosexual en España.
Shangay Lily escribió varias novelas y una antología de sus monólogos teatrales estrenados. Además, se publicará próximamente su ensayo Adiós, Chueca (Memorias del gaypitalismo: construyendo la marca gay). Asimismo, escribió y protagonizó obras teatrales, además de aparecer en varios programas de televisión, entre los que destacan Esta noche, sexoEsta noche cruzamos el Mississippi o La noche prohibida. También debutó en el cine junto a Javier Bardem y Aitana Sánchez-Gijón en la película Boca a boca, y diez años después dirigió y protagonizó Santa Miguel de Molina.
Más allá de su currículo académico, Shangay ha sido un referente –no siempre cómodo- del mundo gay durante 25 años. Su nombre ha quedado grabado en la publicación que bautizó, pero, sobre todo, se había convertido en una voz crítica dentro del mundillo LGTB (lesbiana, gay, transexual y bisexual), sobre todo al fenómeno de Chueca, al que el artista/activista (de ahí el nombre de su blog, Artivista) reprochaba su mercantilización y una especie de banalización de las libertades conseguidas después de décadas de lucha de personajes como el suyo.
En los últimos 20 años fue avanzando en conquistar espacios propios y ajenos, colaborando con numerosas iniciativas más allá de las puramente reivindicativas. La cultura –el arte, su arte- fue su principal arma, unida a una imagen rompedora y muy moderna. Tanto, que Shangay nunca quiso definirse como travesti , transexual o transformista y, un poco en la línea de otra figura como Ángel Pawlovsky –otro grande a caballo entre la Transición y la Movida, donde ambos empezaron a ser famosos-, siguió una línea rotunda y arrolladora, pero difícil de encasillar. La idea de que cada persona es única y debe seguir su camino, poniéndose al mundo por montera, fue una constante en su pensamiento, incluso cuando ello le traía problemas.
En cualquiera caso, su personaje era tan arrollador que dejaba una huella por su contraste con otras artistas de la noche de Chueca, más frívolas y volcadas en el humor. Hasta cuando actuaba en los escenarios más cabareteros transmitía que se tomaba a sí mismo –y a su público- muy en serio.
En la actualidad, escribía en el periódico Público su blog Palabra de Artivista. La capilla ardiente se abrirá este martes 12 de abril a partir de las 10.30 horas en la sala 4 del Tanatorio de la M-30.

martes, 5 de abril de 2016

«Sabían que soy gay y me dijeron todo eso para hacerme daño»






Un árbitro de La Línea denuncia haber recibido insultos homófobos, vejaciones y amenazas durante un partido de cadetes

«No me merezco eso. No me merezco que me pase algo así...», repite una y otra vez Jesús Tomillero, un joven árbitro que se ha convertido para su «desgracia», como él mismo confiesa, en el protagonista de un posible nuevo caso de homofobia.
Ocurrió el pasado sábado 26 de marzo. En la ciudad deportiva de La Línea cuando se celebraba el partido de Tercera Andaluza en la categoría cadete entre los equipos Peña Madridista linense y el Mirador de Algeciras. Todo iba como es habitual, hasta que el colegiado no pitó un posible fuera de juego. «El encargado de material empezó a a gritarme desde la portería y le pedí que se fuera hacia la zona técnica que era donde tenía que estar, pero no me hizo caso. Siguió protestando. Así que le expulsé».
Fue entonces cuando, según refleja la denuncia presentada ante la Policía y el propio acta del partido, el encargado de material comenzó con las amenazas. «Tu y yo nos vamos a ver las caras», le aseguró. En la grada siguió con los insultos. «Le dije al delegado del campo que avisara a las fuerzas de seguridad, que esa persona tenía que marcharse al vestuario y que me estaban amenazando, pero me contestó que yo lo que quería era liarla más».
La situación se agravó. «Estuvo toda la segunda mitad insultándome. Me decía: ‘eres un maricón’, ‘anda, que después te vas a hartar de comer pollas...' Yo intentaba hacer mi trabajo, no hacerle caso pero era difícil». Más aún cuando la actitud del adulto fue secundada por otros jugadores, niños de 14 y 15 años que no dudaron en gritar ‘maricón’ en varias ocasiones a Jesús. «Eres muy malo, sólo sirves para eso», me decían.
el acoso siguió tras el encuentro. «Cuando estaba rellenando ya el parte en el vestuario, dos jugadores me lanzaron una piedra». «Nunca había vivido una situación tan humillante», confiesa. «Llegué a mi casa y no podía parar de llorar, estaba muy nervioso». Por eso, justo por el dolor que le causó todo lo que tuvo que escuchar, decidió denunciar. «Mi dignidad ya no me permite pasar ni una más».
Para este joven linense hay una cuestión por encima de todo lo demás:«Yo no oculto mi condición sexual, soy gay, tengo pareja y aquí nos conoce mucha gente. No tengo que ocultar lo que soy y no me da la gana de hacerlo porque no hago daño a nadie. El problema lo tienen ellos, los que insultan a las alturas en las que estamos ya y no respetan a los demás, no yo. Sabían que soy gay y me dijeron todo eso para hacerme daño».
Jesús Tomillero tiene 21 años y desde los once es árbitro de fútbol. «Lo que les tiene que importar es si pito bien o mal, no lo qué hago en mi vida privada», afirma. «Si yo fuera padre, no permitiría que mi hijo hablara así a alguien y además sería el primero en intentar darle ejemplo». Desde que ocurrieron los hechos, el árbitro linense no ha dejado de recibir por redes sociales el apoyo de decenas de personas y colectivos. «Me dan ánimos y las gracias por haberlo denunciado porque a algunos de ellos les ha pasado lo mismo y no se han atrevido. No sé qué ocurrirá pero tenía que hacerlo. Ya está bien».
Tras su denuncia ha recibido la llamada del sindicato de árbitros que ha lamentado que la sanción impuesta a los agresores haya sido «mínima», el Observatorio Español contra la LGBTFOBIA ha denunciado el caso ante el Comité Antiviolencia. El Ayuntamiento de La Línea le ha prestado su apoyo y también algunos miembros del Partido Popular, ya que Tomillero forma parte del comité ejecutivo de Nuevas Generaciones de La Línea.
«Lo que quiero es que no ocurra más, que nadie tenga que vivir lo que he pasado yo».

sábado, 2 de abril de 2016

Ataques homófobos a un árbitro gay: "Te vas a hartar de comer pollas"

El árbitro agredido, Jesús Tomillero | Fuente: Facebook


Varios jugadores y un encargado de material de un equipo insultaron y amenazaron a un árbitro por su orientación sexual ante la inacción del resto del personal que se encontraba durante la celebración del partido.


Durante un partido celebrado en el municipio gaditano de La Línea de La Concepción el pasado 26 de marzo, entre la Peña Madridista Linense “B” y El Mirador C.D. S.M., cuyos jugadores eran chicos de 15 y 16 años, se profirieron numerosos insultos homóbofos hacia Jesús Tomillero, la persona que arbitraba el partido y que es abiertamente gay. Concretamente, el encargado de material y un jugador del equipo linense le repitieron en varias ocasiones que era un “come pollas” y un “maricón”.
Llegado un momento, las agresiones verbales fueron a más, hasta que el árbitro fue amenazado e intimidado por el encargado del material de la Peña Madridista Linense “B”, quien le espetó: “Tú y yo nos vamos a ver las caras, que te voy a meter un guantazo que te voy a partir la cara”. A pesar de que los agresores fueron expulsados del campo de juego, éstos se negaron a abandonar las gradas, desde las cuales continuaron profiriendo insultos homófobos y amenazas, especialmente el encargado del material, quien continuamente le estuvo gritando frases como “¡Anda que después te vas a hartar de comer pollas! ¡Que eres maricón!”.
Posteriormente, según el acta del partido, mientras el árbitro se encontraba en el interior del vestuario, una piedra golpeó contra la puerta. Además, durante el tiempo en el que transcurrió el encuentro, nadie hizo caso a las demandas de la víctima de los insultos para llamar a las Fuerzas del Orden Público.
Todos estos hechos constan debidamente en el acta que se levantó tras celebración del partido y que ha sido dada a conocer por el sindicato de árbitros. Además, según este sindicato, el árbitro agredido ha sido advertido por su comité de árbitros con la amenaza de suspensión si continúa difundiendo el caso, motivo por el que ha tenido que cancelar varias citas con distintos medios de comunicación para dar a conocer y denunciar lo ocurrido.
La Agrupación Deportiva Ibérica LGTB (ADI LGTB) se ha unido a la denuncia del sindicato de árbitros y han mostramos su sorpresa por la insignificancia de las sanciones aplicadas a los autores de los hechos, que rozan la impunidad, y demandan la actuación inmediata por parte de la federación territorial. 
“Hechos como estos no deben ser obviados ni minusvalorados. Deportes como el fútbol cuentan con millones de seguidores en España y gozan de un fuerte impacto mediático y capacidad de influir en la sociedad. La homofobia y otras formas de discriminación por razón de orientación sexual o expresión de género, son frecuentes entre seguidores y jugadores, no sólo en determinados grupos, sino en toda la cultura del fútbol. Es frecuente la utilización de expresiones homófobas para insultar, intimidar y ridiculizar a jugadores, seguidores y árbitros”, ha denunciado ADI LGTB.
Por su parte, el sindicato de árbitros ha anunciado que el caso está ya en manos de la justicia y han pedido la dimisión de los dirigentes de la Real Federación Andaluza de Fútbol “por su intento de tapar el caso y que no salga a la luz pública, además de por las sanciones tan mínimas que se han impuesto”.