La plataforma de víctimas por la Comisión de la Verdad se reunirá la semana que viene con miembros del Grupo de Trabajo de la ONU sobre Desapariciones Forzosas o Involuntarias
La plataforma de víctimas del franquismo por la Comisión de la Verdad se reunirá la semana que viene con miembros del Grupo de Trabajo de la ONU sobre Desapariciones forzosas en Madrid para exponer lo que definen como "un desamparo político y jurídico" de las víctimas del franquismo en España. Varios diputados han mostrado su apoyo a la querella que se tramita en argentina y que ayer ordenó la detención de cuatro presuntos torturadores de la ditadura, mientras que los impulsores de la querella han mostrado su satisfacción por el desarrollo del proceso judicial.
El calendario de la plataforma por la Comisión de la Verdad empieza la semana que viene: se reunirán el próximo martes día 24 con los miembros del Grupo de Trabajo de la ONU sobre Desapariciones Forzosas o Involuntarias, a quienes entregarán un dossier detallado sobre la situación actual de las investigaciones de los crímenes de la dictadura y lo que definen como "un desamparo político y jurídico que impide la resolución de miles de crímenes cometidos a lo largo de la dictadura". Una acción que se extenderá a Sevilla y al País Vasco y que culminará con un acto público en la Puerta del Sol en Madrid a lo largo de la semana próxima.
Según han explicado en un acto público frente al Congreso de los Diputados, el objetivo de este encuentro es que las Naciones Unidas y su Grupo de Trabajo tomen cartas en el asunto y que "por fin alguien se decida a hacer justicia y restituir la memoria histórica de nuestro país". Desde esta plataforma de víctimas y familiares por la Comisión de la Verdad no han dudado en criticar con dureza la posición de la justicia y autoridades españolas, definiendo como "una vergüenza" que, finalmente, haya que recurrir a instancias europeas para poder investigar los presuntos crímenes de la dictadura.
"La justicia argentina le marca el camino a la española"
Varios diputados han salido al encuentro de los manifestantes a las puertas del Congreso de los Diputados, y han mandado tanto un mensaje de apoyo a la investigación de la jueza argentina como un mensaje de exigencia al Gobierno español. Para Ángeles Álvarez, diputada del PSOE, la democracia española "tiene una deuda no resuelta con los familiares de los fallecidos" durante la dictadura, y también apunta que la justicia argentina "está marcando el camino a la justicia de España". En ese mismo sentido se ha pronunciado el coordinador de Izquierda Unida, Cayo Lara: para él, "España no puede perder el tren de la historia, y hasta ahora lo tiene perdido". Según Lara, "tiene que ser un gobierno democrático, legítimamente elegido por el pueblo, quien tiene que restituir la memoria y sentar en el banquillo a quienes realizaron esos asesinatos".
Alfred Bosch, portavoz de ERC, también cree que España debería involucrarse en la investigación de los crímenes de la dictadura: "La verdad duele, pero el olvido mata, estamos hartos de ser el agujero negro de Europa en el tema de memoria histórica y la justicia, celebramos que en Argentina esté abierta una causa". Tanto desde el Bloque Nacionalista Galego como desde la Chunta Aragonesista se han mostrado indignados con el hecho de que haya tenido que ser la justicia argentina, y no la española, quien se decida a investigar los posibles crímenes del franquismo.
"No quiero morir sin ver los huesos de mi padre"
Ante los leones del Congreso también se han manifestado varias decenas de víctimas y familiares de víctimas del franquismo, con pancartas con fotos de sus familiares asesinados durante la dictadura y con proclamas contra la impunidad. Muchas voces para un mismo mensaje: "Es una vergüenza y una pena que tenga que ser una jueza argentina la que investigue esto, y no la justicia española". Tienen muchas esperanzas puestas tanto en la querella que recorre los juzgados de Buenos Aires como en la reunión que la Comisión de la Verdad mantendrá con el grupo de trabajo de las Naciones Unidas. "Tengo setenta años, no me quiero morir sin ver los huesos de mi padre y lo único que tengo es una carta de un Ministro de Justicia diciendo que a mi padre le mataron por sus ideas políticas", comentaba Guillermina, cuyo padre fue fusilado cuando tenía ocho años. Gritos de "Tenemos memoria, queremos justicia" y "No a la impunidad" para pedir una investigación ante las escaleras del Congreso de los Diputados.
Alegría y cautela desde las asociaciones impulsoras de la querella argentina
Las asociaciones que han impulsado la querella argentina ven una "puerta abierta a la esperanza" tras la orden de detención internacional de cuatro ex miembros de las fuerzas de seguridad españolas, que presuntamento habrían cometido delitos de crímenes contra la humanidad.
Ahora la decisión de si estas cuatro personas han de ser detenidas y extraditas, está en manos del Gobierno. Manuel Blanco Chivite, miembro de Asociación de Ex-presos del Franquismo, cree que "sería triste que la democracia fuese el manto protector de torturadores reclamadas internacionalmente". Para Ana Messuti, una de las abogadas de la causa, afirma que si España se niega a cumplir esta orden, habiendo firmado los tratados pertinentes con Argentina, "no quedaría con muy buen pie".
Bonifacio Sánchez, miembro de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH), ve "una puerta abierta a un futuro esperanzador para un país que no contaba con ello".Destaca que esta resolución "desmonta" el argumento de que la Ley de Amnistía de 1977 era determinate para juzgar o no los crímenes del fraquismo", y que también "deja en evidencia al poder judicial y político español".
Ana Messuti, cree que el auto de la magistrada responde a sus peticiones, pues estos delitos son "imprescriptibles", aunque asegura que "esto es algo parcial, y queremos que todo esto se reconozca en el marco de un genocidio". La abogada califica este auto de "histórico para España", y asegura que "es la primera vez que se exige que alguien responda de lo que ha hecho en la dictadura". Messuti también destaca que "están realizando una carrera contra el tiempo, no sólo se mueren los verdugos, sino que también se mueren las víctimas y es necesario que las víctimas vean esto".
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