Los populares tienen abierta una cruzada contra el mundo gay y todavía no llego a comprender los verdaderos motivos de esta cerrazón, de este enconamiento con posturas que parecen irreconciliables. Cuando el PP alega que “desnaturaliza la institución del matrimonio” rememoro argumentos rancios de épocas pasadas de férreo pensamiento anclado en el “Movimiento Nacional” donde la represión era el pan nuestro de cada día y el que se saliera de esa línea se convertía en un paria social. Habría que refrescar las memorias adormecidas de aquellos que argumentan que “antes vivíamos mejor” para recordarles que nos faltaba algo fundamental: la posibilidad de expresar libremente nuestras opiniones si no queríamos dar con nuestros huesos en la cárcel.
El PP se ha dedicado a enarbolar la bandera de la familia tradicional con el apoyo incondicional de la Iglesia católica olvidando que los fundamentos básicos de la institución se basan en los pilares del amor, la comprensión y el respeto mutuo. Cuando se cumplen estos requisitos, ¿qué más da el sexo de los contrayentes?. Me pierdo en los argumentos legales sobre vulneración de artículos de la Constitución. Sólo sé que la Carta Magna dice que todos tenemos derecho a una vivienda digna y a un trabajo y esos preceptos no se cumplen. ¿Qué argumentan los políticos a aquellos más de cuatro millones de parados que tenemos en este país y a aquellos que no pueden comprarse una vivienda porque nadie les da crédito?. ¿Por qué ningún partido político convoca una masiva manifestación para reivindicar estos derechos inherentes de nuestra Constitución?. Cuando el PP ha apoyado las concentraciones convocadas por colectivos como “Hazte Oír” o “Foro español de la Familia” se ha convertido en el partido que, por primera vez en la historia de nuestra democracia, asiste a una manifestación para evitar la ampliación de derechos a millones de ciudadanos.Hay derechos adquiridos que no admiten retrocesos y el matrimonio entre personas del mismo sexo y la posibilidad de que adopten son preceptos adquiridos que sería un error que el PP eliminara porque estaría atacando a un colectivo social que se ha visto sistemáticamente marginado. Expulsar del Código Civil a los homosexuales, los lleva a la segregación y al apartheid. En cuanto a la negación del derecho de adopción a los gays sería un error.
Los colectivos homosexuales calculan que hay más de 80.000 niños con dos padres o dos madres y éstos pequeños se quedarían desamparados. Pero parece ser que el PP quiere ir más allá en sus “leyes apartheid” y es posible que para no dejar ninguna puerta abierta a la adopción por parte de homosexuales pretende eliminar la Ley de 1987 que permite adoptar a individuos solteros. Curiosamente, Rajoy ha asegurado que quitará a los matrimonios homosexuales el derecho de adopción si gana las próximas elecciones, aunque no modificará la ley del divorcio exprés ni la del aborto -que debe apreciar como menos peligrosas para la conservación del estatus de la familia nuclear-.
El absurdo llegó hasta el punto de que, con tal de no mencionar la homosexualidad, uno de los borradores que el PP consideró más en serio cuando estaba en el gobierno fue uno de contratos por el cual se regulaban relaciones que ni siquiera tenían por qué ser sentimentales, registrándose ante notario y no en los registros civiles, permitiendo unir homosexuales de igual manera que también permitía unir amigos, socios de una empresa o de una peña, e incluso familiares.Sería muy bueno que el señor Rajoy escuchara otras voces a la hora de pedir consejo en las filas de su partido porque no todo el PP es homófobo. Recuerdo cuando el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, ofició la boda entre el responsable del Programa de Asesoramiento de Gays, Lesbianas y Transexuales de la Comunidad de Madrid, Manuel Ródenas, y el militante del Partido Popular, Javier Gómez. Fue el primer enlace entre personas del mismo sexo que celebraba el primer edil de la capital española o la defensa que del colectivo y de sus derechos siempre ha hecho una ex alcaldesa y ex ministra como Celia Villalobos.
Vayan tomando ejemplo porque seguro que hay muchos más apoyos que no se atreven abiertamente a expresar sus ideas dentro del PP o ¿es que en las filas populares no hay homosexuales que se quieren casar y adoptar?.
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