Por primera vez De la Vega niega tajantemente que sea lesbiana
La vicepresidenta habla de los rumores sobre su sexualidad en una jugosa entrevista que se publicará este domingo. De todos los "líos" que le han atribuido, uno le dolió especialmente.
En campaña se llevan los reportajes más personales, y el Gobierno se ha subido al carro. A José Luis Rodríguez Zapatero le tocó el domingo en su diario de cabecera, El País; días después, a Carme Chacón en la revista Elle; y el domingo será el turno de María Teresa Fernández de la Vega en el Magazine de El Mundo.De momento el diario de Pedrojota publica este viernes en su página web un suculento aperitivo. Por primera vez alguien se ha atrevido a preguntarle a la vicepresidenta con luz y taquígrafos si es verdad ese rumor que corre sobre ella desde hace años. "¿Usted es lesbiana?", pregunta el periodista. "Hombre, ¡por fin me lo preguntan! Pues mira no. Es un rumor sobre mí que se han inventado para hacer daño con algo que, oye, respeto absolutamente. No tengo ninguna homofobia, ¡pero no soy homosexual! Si lo fuera, no tendría ningún problema en decirlo. ¡Pero es que no lo soy", responde la número uno del PSOE por Valencia. A renglón seguido el periodista vuelve a la carga con el runrún que corre sobre lo suyo con una famosa presentadora de Deportes de TVE. "¡Y dale con eso! ¡Pero si no la conozco, que no nos hemos visto en la vida! ¡Y me casan con ella!", se defiende Fernández de la Vega. Ella misma detalla otros dos líos amorosos que las malas lenguas le han atribuido en estos años: una médico del Hospital Gregorio Marañón y una amiga suya de Palma de Mallorca. Por sus palabras se deduce que esto último le molestó soberanamente. "Eso es impresentable. Palma, un sitio pequeño, ¡y sacaron su nombre! Me parece disparatado y discriminatorio", se queja.La dirigente socialista confiesa que su madre siempre le decía aquello de "te tenías que haber casado", pero que a ella lo que verdaderamente le produce una "enorme felicidad" es "estar sola en mi sofá, tranquila con un poquito de música, sin oír a nadie, ¡sin que suenen los teléfonos!". Habrá que esperar hasta el domingo para leer el resto de las confesiones de la vicepresidenta.
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